Elige la forma de conocer tu preparación:
¿Cómo debes prepararte para el exámen?
Lee cuidadosamente y sigue estas recomendaciones como preparación para tu exámen
- Entre 6 y 8 horas antes de la prueba no debes comer ningún alimento ni beber líquidos. Solo puedes tomar agua.
- Una hora y media antes del examen debes tomarte entre 4 y 5 vasos grandes de agua, en forma continua. No debes tomar bebidas con leche ni gaseosas.
- Después de que te tomas los 4 o 5 vasos de agua no debes orinar.
- Debes presentarte al examen con la vejiga llena y con ganas de orinar.
- Si se te dificulta retener la orina porque sufres de incontinencia, ingiere menos cantidad de agua y con menor tiempo antes del estudio. Trata de aguantar las ganas de orinar lo que más te permita tu cuerpo.
- Si sufres de los riñones, te recomendamos que tomes la cantidad de agua que tengas permitido beber y que lo hagas 1 hora antes de la prueba.
- Los pacientes menores de 18 años deben estar acompañados de un adulto responsable que conozca su historia clínica y con capacidad de decisión acerca de los procedimientos que le van a realizar como paciente.
- No es necesario que los adultos asistan a la prueba con un acompañante. Por tu tranquilidad y comodidad, evita acudir al examen con personas a cargo como niños, adultos mayores o personas en situación de discapacidad o con movilidad reducida.
¿Qué documentos debes presentar?
Documento de identidad
Orden médica vigente y autorización del servicio, si tu EPS o tu plan de salud así lo requieren. Estos documentos son fundamentales para realizarte la prueba.
Exámenes anteriores que te hayan realizado y que estén relacionados con el procedimiento.
¿Qué cuidados debes tener durante el exámen?
- Si sufres de los riñones, debes informárselo al radiólogo para que te realice la prueba con la cantidad de orina que pudiste retener, sin hidratarte más de lo que tu condición te lo permite.
- Puedes continuar con las actividades que haces en tu vida diaria como ir a trabajar, estudiar, ejercitarte o manejar.
- Si tienes alguna duda, consulta con nuestro personal de salud.
¿Para qué sirve esta prueba?
- Se utiliza para ver cómo se encuentran los órganos internos en tu abdomen.
- Los órganos que te examinan son: el hígado, la vesícula, la vejiga, el bazo, el páncreas y los riñones, la vejiga y los órganos genitales internos en las mujeres y la próstata en los hombres.
- Sirve de apoyo para el diagnóstico de enfermedades del hígado o de vesícula, de las vías biliares, hepatitis, adenomas, pancreatitis, cálculos e inflamación en la vesícula (colecistitis).
- También para detectar cálculos o piedras en el riñón, quistes y tumores.
¡Gracias por tener en cuenta estas recomendaciones que contribuirán con un correcto diagnóstico y el tratamiento que realmente necesitas!
